Recuperando El Ritmo De Juego

Después de algunos meses, de idas y venidas. De estar redescubriendo este hermoso oficio de escritor me di cuenta que en los últimos 15 meses del blog no escribí ni el 75 % de lo escrito en el primer año. Esto me llevó a darme cuenta que me hace falta algo muy importante: constancia.

No quiero caer en juicios de valor y analizar por qué disminuyeron las publicaciones, por el contrario, quiero que esta experiencia de redescubrimiento me sirva para reforzar mis convicciones y retomar el ritmo de juego que tan feliz me hizo desde inicios del 2014. Cuán lejanos quedaron los días de los primeros posts en los que aún no tenía una idea clara de cuál sería mi estilo, de qué hablaría y cómo lo haría. Con el pasar de cada nuevo golpe a las teclas y cientos de párrafos comprendí que un escritor jamás deja de aprender y que solo a través de la práctica permanente de esta profesión se pulen los detalles y se corrigen los errores. Como una colega una vez me dijo: “es en la sala de redacción donde se forja el verdadero periodista”. Si bien no he decidido si ese será mi camino, hoy disfruto de lo que hago y espero poder seguir escribiendo mucho más. En este blog, en mi trabajo o de manera freelance.

Me comprometo nuevamente a dedicarle un par de minutos cada día a pensar nuevos temas para el blog, darle vuelta a los hechos noticiosos en busca de la verdad, dibujar nuevas caricaturas, contar mejores historias y sobre todo, divertirme haciendo lo que me gusta. Jamás imaginé llegar a 100 publicaciones y mientras  escribo la número 111, me regocijo de alegría de saber que en la vida al igual que al escribir, no debemos fijarnos cuánto nos falta para terminar el texto, sino disfrutarlo cuando lo hayamos hecho. El camino es largo y las oportunidades de ser feliz infinitas y es lo que pienso hacer.

Qué mejor manera de festejar el día del trabajo que descubrir que amamos lo que hacemos.