Una Bocanada De Vida

¿Cuánto cuesta levantarse cada mañana? Algunas veces puede parecer que el peso del mundo reposa sobre nuestros hombros y que estar postrado en cama es la única escapatoria a los problemas que enfrentamos cada día. Olvidamos por completo que al mismo tiempo que abrimos los ojos, muchas más personas no vuelven a ver la luz del Sol; caen presas de diversas enfermedades o sus alas son arrebatadas por la maldad de otros. La vida es un regalo que no debemos dar por sentado.

Vivimos sin saber la raison d'etre de nuestro caminar por el valle de sombras y lágrimas. Somos un hilo que forma parte de un estratosférico entramado de hermosos colores y texturas. Algunos andan por ahí sueltos, esperando la tijera del sastre, mientras que otros son parte de los tramos más importantes del celestial diseño.

Tengo la certeza de que ni el universo o el más ínfimo átomo se detendrá en el momento de mi partida hacia el sueño eterno; por eso hay que decidirse a vivir cada hora, minuto y segundo como el más apropiado para detenerse a apreciar lo hermoso de una cálida brisa sobre el rostro o el caer de la lluvia en el cabello.

Existimos porque tenemos el valor de tomar una bocanada de vida y decirle presente a las cargadas, a las risas, a la muerte, al estrés, a los llantos, a los gordos, a los flacos, a los mala onda, a los genios, al amor, al odio, al frío, al hambre, a la diversión. Existimos porque cada mañana nuestro espíritu le dice presente a la historia que cada uno tiene.

Vivimos porque al final del día siempre hay una nueva vuelta a la página para ser, para estar, para morar bajo la sombra de un nuevo amanecer. Tictoc, tictoc, toma una bocanada de vida y sal a descubrir las maravillas que tiene tu mundo.

Imagen tomada del buscador de Google.