En El País De Lo Contrario

Diferente a lo que muchos puedan pensar, tener la razón no siempre indica que se está en lo correcto, ¿extraño verdad? Al menos así lo cree un grupo que considero “élite” porque tiene una fantástica habilidad para obviar los hechos objetivos de cualquier tema con tal de mostrar que quién tiene la razón está equivocado.

De seguro en algún momento de la vida deben haberse encontrado en esa incómoda situación en la que están teniendo una amena discusión con un grupo de personas y de repente uno de estos seres “élite” aparece para formar parte de lo que era una tranquila conversación. Todo comienza con una frase que parece casi de guión, “sí, puede que tengas razón pero te equivocas”, ¿es acaso eso posible? Es imposible tener la razón y estar equivocado al mismo tiempo. Pero, su primer acercamiento debe ser sutil, y esta frase se presta a la ambigüedad semántica necesaria para poder comenzar a lanzar la contraria.

Sería mucho más sencillo simplemente que estas personas escuchen, saquen conclusiones, analicen y si después de eso no están de acuerdo, entonces expresar el rechazo hacia las ideas expuestas. Pero llevar la contraria y buscar a toda costa demostrar que los demás están equivocados puede ser más “divertido”.

Que terrible dolor de cabeza tener que lidiar con personas así, pero qué se puede hacer, después de todo el mundo es una caja de chocolates como dice Forrest Gump. 

¿Se debe discutir aún más con estas personas? Mi sano consejo es, no proseguir en lo que se transforme en una distorsionada conversación en la que el único propósito sea degradar el asunto a un juego de quién tiene la razón y quién se equivoca.

Tal vez el mejor consejo que puedo dar es que simplemente rían ante estas situaciones, después de todo en muchos casos la vida termina siendo una gran broma, y cuando te das cuenta de algo así entonces es mejor ser el comediante que el remate de algún mal chiste. Pero, si desean entrar en combate con los visitantes del país de lo contrario, entonces deben ser muy pacientes porque se podrán desperdiciar horas de horas tratando de aclarar el distorsionado tema. Se podría decir que estarán en una situación física en la que una fuerza indetenible trata de mover un objeto inamovible. Qué paradójico en verdad.
“Nunca discutas con un estúpido, te hará descender a su nivel y ahí te ganará por experiencia.” -- Mark Twain

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